El ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, reconoció en abril el retraso de un mes de la apertura de solicitud del cobro por parte de 20.000 empleadas del hogar de la prestación por desempleo como ayuda ante despidos o reducciones de jornada por la pandemia. Poco ha cambiado esa situación estas semanas. El colectivo, que hace unas semanas estrenó el acceso histórico al paro para unas 600.000 mujeres, muestra ahora escepticismo sobre cuándo se materializará el ingreso al que hasta el momento solo ha podido acceder un bajo porcentaje de las solicitantes.
La asociación Servicio Doméstico Activo (SEDOAC) denuncia varias trabas a la hora de acceder al subsidio. Entre ellas, el plazo con el que cuenta el Servicio Estatal de Empleo Público (SEPE); el organismo tiene hasta tres meses desde la fecha de cada solicitud para dar una respuesta y las organizaciones de empleo doméstico temen que el primer pago para las trabajadoras se demore hasta septiembre.
Esa situación será insostenible para muchas mujeres, según explica Carolina Elías, presidenta de SEDOAC: “Ven imposible sostener a sus hijos, muchas son cabeza de familia (monoparentales) que tienen que seguir pagando el alquiler, comprando comida, algunas hasta están en situación de calle”. En este sentido, desde la asociación reclaman agilizar los tiempos de resolución para cada solicitud por parte del SEPE.
Otro problema que encuentran las empleadas del hogar es la ausencia de medidas que obliguen a los empleadores a facilitar la documentación requerida para la solicitud de la ayuda. Estas trabajadoras denuncian que en muchos casos no pueden acceder a la declaración responsable, requisito imprescindible para tramitar la solicitud de la prestación, y piden mayor flexibilidad y una ampliación de periodo de solicitud una vez finalizado el estado de alarma.
Además, critican la falta de acompañamiento por parte del SEPE a quienes no tienen acceso o conocimientos digitales para realizar la solicitud de forma online y el mal funcionamiento de la asistencia telefónica. Así, la asociación reclama que se habilite un teléfono exclusivo para que las trabajadoras puedan llamar y recibir la atención sobre dudas con respecto a la presentación.
Desde SEDOAC recuerdan que la ayuda del Gobierno “deja fuera al 40% de las trabajadoras del hogar en España” que se han quedado sin posibilidad de acceder al subsidio temporal, y la mayoría de ellas tampoco podrá solicitar el Ingreso Mínimo Vital. La asociación insiste en la necesidad de aprobar medidas complementarias como la regularización urgente y sin condiciones para las que no cuentan con un permiso de residencia y trabajo. “A pesar de su situación irregular, estas mujeres han seguido sosteniendo la vida en este país, en un momento tan necesario como es esta crisis sanitaria”, recuerdan.
También subrayan que la medida del subsidio temporal “no soluciona la discriminación que sufren las trabajadoras del hogar al formar parte de un Sistema Especial de cotización de la Seguridad Social en el que no disponen de los mismos derechos que el resto de trabajadoras”. Se refiere al subsidio por desempleo o la ley de Prevención de Riesgos Laborales, entre otros, e instan al Gobierno a adecuar la Ley 1620/2011 y ratificar el Convenio 189 de la OIT “para desarrollar medidas que promuevan la equiparación de derechos de este colectivo con el resto del ámbito laboral”.
Fuente: El Economista
