País Vasco, Cantabria, Canarias y Asturias son las comunidades autónomas más afectadas por esta práctica según un informe publicado por Randstad con datos del 2T de 2022
El absentismo laboral supone un problema para las empresas españolas, no sólo porque merma su productividad, sino también por el coste que esto supone.
En concreto, durante el segundo trimestre del año [último dato disponible] faltaron a su puesto de trabajo una media de 1.261.633 personas al día. De ellas, el 77,4% lo hizo como consecuencia de una baja por incapacidad temporal.
El fuerte incremento del absentismo del último año tuvo sin embargo su pico en el primer trimestre, cuando alcanzó la cifra más alta desde la pandemia, con 1.428.904 personas faltando a diario a su trabajo.
Esta situación provocó que en nuestro país se perdiera el 6,2% de las horas pactadas durante el segundo trimestre del año, cuando la jornada semanal acordada era de 34,7 horas, según el INE. Un año antes, la tasa se situaba en el 5,8%, es decir, en tan sólo un año, las empresas han experimentado un incremento de 0,4 puntos porcentuales. Además, la falta de trabajadores, tanto por baja médica como por otros motivos, implica un coste laboral para las empresas. De acuerdo con los datos del INE, entre marzo y junio de 2022, este se situaba en 2.871,64 euros por trabajador y mes.
Cantabria (7,3%), Asturias (6,9%), Galicia (6,8%) y Navarra (6,6%) fueron las autonomías que perdieron más horas como consecuencia de la ausencia de sus profesionales, todas ellas por encima de la media nacional (6,2%). En el lado opuesto, sólo siete comunidades autónomas se situaron por debajo de la media, siendo la Comunidad de Madrid la que registró la tasa más baja, con un 5,3%. Las otras seis fueron Islas Baleares, Comunidad Valenciana, La Rioja, Extremadura, Castilla-La Mancha y Andalucía, todas por debajo del 6%.
Sin embargo, si se tiene en cuenta el volumen de personas, el ránking cambia. En este sentido, Cataluña, Andalucía, Comunidad de Madrid y Comunidad Valenciana lideran la lista con el mayor número de personas que faltaron a su lugar de trabajo; mientras que La Rioja, Cantabria y Navarra ocupan el lado opuesto con menos absentistas.
La mayoría de las personas que faltaron al trabajo lo hicieron con una baja por incapacidad, sin embargo, la cifra de aquellos que se ausentaron sin justificación ha experimentado un repunte del 3% con respecto al mismo periodo del año anterior y ha sido especialmente fuerte en Aragón y Cantabria, donde este sector representó el 27% y 26% respectivamente.
Dentro de los sectores con menor nivel de absentismo encontramos el de Actividades relacionadas con el empleo (2,5%) y Programación y el de Consultoría y otras actividades relacionadas con la informática (3,2%). Por otro lado, encontramos sectores con niveles de absentismo comprendidos entre 4,9% y 5,5%. Dentro de estos encabezan la lista los sectores de Actividades veterinarias, Seguros, reaseguros y fondos de pensiones, excepto Seguridad Social obligatoria y Fabricación de productos informáticos, electrónicos y ópticos, que todos ellos cuentan con un nivel de 5,5%.
En cuanto a ramas de actividad, el informe revela que el sector servicios registró el mayor absentismo, con una tasa del 6,3%, y fue especialmente alto en las actividades sanitarias, donde la tasa alcanzó el 10,2%. También las actividades de servicios sociales sin alojamiento y aquellas en establecimientos residenciales presentaron tasas elevadas, con un 10,1% en ambos casos. Por detrás, los trabajadores de correos y otras actividades postales fueron de los que más se ausentaron y provocaron una pérdida del 9,8% de las horas.
Le sigue de cerca el sector de la industria con un 6,2% y fue precisamente en el ámbito de la construcción donde hubo menos absentismo. Entre abril y junio la tasa en ese sector fue del 4,7%, un punto y medio por debajo de la media.
ENLACE AL INFORME
Informe absentismo laboral | Segundo trimestre 2022 | Randstad Research