Muchos son los académicos que se han apresurado en los últimos meses a tratar de despejar la broza que la reforma laboral ha hecho brotar en el mercado de trabajo español por los cambios introducidos sobre el mapa de contrataciones. Principalmente, por el elemento distorsionador que ejerce el registro de los trabajadores con contrato fijo discontinuo, al no estar reflejada su situación si en activo o en periodo de paro, y porque esos que están en situación de desactivación no aparecen reflejados en las listas del paro ni aunque pasen a percibir la prestación hasta ser llamados.
Esto ha llevado a no pocos expertos y casas de análisis a acuñar en sus balances sobre el comportamiento del mercado laboral una nueva rúbrica, el paro efectivo o paro real. Así lo hacen Randstad o Adecco, al hablar de desempleo en su «definición amplia», o la serie estadística original que inició en abril de 2022 Fedea diferenciando entre paro registrado -el dato mensual que ofrece el SEPE- y paro real -en el que al paro registrado se suman los demandantes de empleo con relación laboral-.
Según este cálculo que desgrana con ABC el economista e investigador de Fedea, Florentino Felgueroso, el paro real en España se situaría en este momento en 3.386.607, lo que supone un 22% más que el último registro publicado por el Ministerio de Trabajo a cierre de octubre en el que cuantificó 2.759.404 desempleados en nuestro país. La diferencia está en los 627.203 demandantes de empleo con relación laboral inscritos, que suponen un 35% más que hace un año y el triple que en el mismo periodo de 2019 -grupo en el que se encuentran los trabajadores en ERTE, ya con una incidencia residual, y los fijos discontinuos en paro que buscan un trabajo complementario-.
Además, esta versión ampliada del desempleo pondría en entredicho parte de la prolija producción laboral de la que ha presumido el Gobierno durante la legislatura y que durante los días de la investidura el propio presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha cualificado en dos millones de puestos de trabajo creados desde que llegó a La Moncloa.
¿El nivel más bajo desde 2008?
De hecho, si bien los 2,7 millones de parados suponen el menor nivel desde 2008, si trasladamos la comparativa a la cifra de paro real, los 3,4 millones mencionados, el desempleo se situaría en niveles similares a los registrados en octubre de 2018, sólo unos meses después de que Sánchez accediera al Gobierno por vez primera. Entonces la cifra era de 3.254.703 desempleados.
No obstante, parece que el Gobierno comienza a asumir que el mercado laboral dejará de desempañar las cifras económicas de nuestro país en los próximos meses. Tal y como refleja el Plan Presupuestario 2024, se estima que el empleo crezca a lo largo del próximo año la mitad que en el presente año, el 1,4%. Mientras que la empresa especializada en recursos humanos Adecco estimó en el análisis de la EPA del tercer trimestre que el paro registrado cerrará el año en 2.818.600 personas, y en más de 3,5 millones contabilizando otros tipos de situaciones de personas que no estén trabajando y que incluso estén cobrando prestaciones por desempleo.
Fuente: ABC
Los analistas sitúan el paro real en España un 22% por encima de los registros del Gobierno (abc.es)