Su consumo de recursos tributarios crecerá de modo constante en las dos próximas décadas
Los expertos instan a la UE a enmendar la norma para evitar un alza exagerada del déficit
Fedea alerta del efecto dominó que la reforma de las pensiones acordada con Bruselas provocará sobre las cuentas públicas españolas. La entidad pronostica que el gasto en pensiones irá creciendo año tras año, hasta alcanzar el 17,8% en 2050, 2,5 puntos por encima de lo previsto por el Gobierno. Esto, ensanchará progresivamente el déficit del sistema público de pensiones hasta los 6,3 puntos en 25 años, obligando al Estado a dedicar el 50% de los ingresos tributarios netos -excluyendo las aportaciones regionales y locales- a taponar la brecha en 2050. Según los cálculos del director, Ángel de la Fuente, ese esfuerzo será del 40% durante las próximas dos décadas.
El texto, convalidado por el Congreso en marzo de 2023, promete un aumento progresivo de las bases máximas de cotización, establece una cuota de solidaridad para que la masa salarial quede por encima de la base máxima y, por tanto, exenta de cotización, contribuya a la sostenibilidad del sistema; e incluye un Mecanismo de Equidad Intergeneracional que recoge medidas para llevar a cabo un incremento adicional de las cotizaciones sociales, un ajuste sobre el gasto o una combinación de ambas en el caso de que el gasto en pensiones se desvíe. Un hecho que podría producirse antes de los previsto.
Lo cierto, es que la Comisión Europea ya ha dado algún toque de atención. A finales del pasado año, los de Ursula von der Leyen enmendaron el cuadro de previsiones sobre el que se basa la reforma. Estiman que la economía crecerá una media del 1,2% entre 2022 y 2050, por debajo del 2% anual sobre el que José Luis Escrivá redactó el texto. A esto, se suma el contenido del informe sobre envejecimiento que Bruselas tiene previsto publicar en los próximos meses, y que podría precipitar la llegada de medidas de corrección para compensar una evolución del gasto en pensiones mayor al calculado por el ministerio de la Seguridad Social.
Fedea cuenta con que será necesario un ajuste ya en 2025, como también lo prevén instituciones del rango del Banco de España o la AIReF; sin embargo, el gasto en pensiones -no sólo podría llegar antes- sino que podría ser mayor incluso al estimado. Buena parte de los organismo calculan que se desviará por encima del 13,3% del PIB, el tope que automatiza las medidas de ajuste. “Estas proyecciones activarían inmediatamente la cláusula de salvaguardia, lo que obligaría a un aumento de las tasas de contribución social de entre 3 y 4 puntos porcentuales”, afirma de la Fuente, que considera que lo más prudente sería que el ejecutivo comunitario forzara al Gobierno a reconsiderar la reforma para aplicar “correcciones importantes” desde el mismo momento de su aprobación.
El documento también critica la laxitud que los de von der Leyen habrían mostrado durante los procesos de desembolso de los ‘Next Generation’. “En muchos casos, los informes simplemente señalan que la ley pertinente ha sido aprobada, sin examinar detenidamente su contenido y sus posibles deficiencias”, afirma..
Fuente: El Economista Las pensiones absorberán el 50% de ingresos estatales con la actual reforma (eleconomista.es)