El tiempo efectivo de trabajo de los funcionarios cae a 23,3 horas, 5,6 menos que en el sector privado
Las horas trabajadas por los asalariados continúan desplomándose, una tendencia que tomó fuerza durante la pandemia y que no se ha conseguido modificar. Con el debate de la jornada laboral de 37,5 horas semanales de fondo y con más empleo, aunque de peor calidad, la caída de la productividad y del tiempo efectivo de trabajo es cada vez más patente.
Los datos cruzados de diferentes estadísticas que publica de forma periódica el Instituto Nacional de Estadística (INE) analizados por THE OBJECTIVE muestran que en el tercer trimestre de 2023 las horas efectivas trabajadas por los asalariados suponen 27,85 semanales. Estas son casi cuatro menos que las que se registraron en los tres últimos meses de 2019.
Las diferencias cada vez son más notables entre los asalariados del sector privado y el público. Las horas semanales reales de los funcionarios son apenas 23,3 frente a las casi 29 del sector privado. Las jornadas de trabajo en las administraciones son menores que en las empresas y seguirán reduciéndose. Los representantes sindicales reclamarán de cara durante la legislatura las 35 horas semanales. Es una de sus metas, como lo es mantener el teletrabajo, negociar un nuevo acuerdo salarial y eliminar la tasa de reposición. Uno de cada cuatro funcionarios de la Administración del Estado trabaja en su domicilio. Esto supone 55.000 trabajadores, 10.000 más que a mediados del año pasado.