El periodo mínimo que les exigirá será de dos años, acreditado por un certificado de padrón
Una vez finalizada la reforma de pensiones, la actual ministra de Seguridad Social, Elma Saiz, busca llevar a cabo los últimos retoques. La navarra negocia actualmente la reforma de la prestación por incapacidad temporal, los cambios en la jubilación flexible y las cuotas que pagarán los autónomos entre 2026 y 2028. Y, aunque no estaba previsto, el Ministerio también presentó una propuesta el lunes pasado para ampliar el rango de la prestación por viudedad. Según un documento enviado a agentes sociales y al que ha tenido acceso elEconomista.es, la cartera propone extender esta pensión a parejas que convivan y que tengan hijos en común.
La diferencia con la norma actual es que, para cobrar la prestación por fallecimiento, el perceptor ya no tendría que acreditar la existencia de pareja de hecho mediante un documento público ni tampoco tendría que estar casada con el fallecido. En caso de aprobarse esta propuesta inicial del Ministerio, la Administración exigiría únicamente el certificado de empadronamiento y una convivencia estable durante un periodo de al menos dos años ininterrumpidos. Algo que se aplicaría solo en el caso de parejas con hijos.
La modificación propuesta por Saiz establecería cambios en el artículo 221 de la Ley General de Seguridad Social, que regula las pensiones de viudedad en parejas de hecho. Es decir, al tratarse de un cambio en la ley, para llegar a materializarse la modificación tendría que aprobarse en el Congreso de los Diputados.
Por otro lado, Saiz también propone cambios en los supuestos excepcionales. En concreto, elimina la disposición adicional cuadragésima de la ley, que hasta ahora regula estos casos y agrega una nueva disposición. Entre los cambios destaca, por ejemplo, que mientras ahora se exige que el beneficiario no tenga reconocido derecho a pensión contributiva de la Seguridad Social; la propuesta solo establece «normas de limitación» a la cuantía de pensión que esta persona recibiría.
Reformar la pensión de viudedad es, precisamente, una de las recomendaciones del Pacto de Toledo de 2020. El documento incluía la necesidad de reformar esta prestación en favor de la pensión de orfandad. Es, en concreto, la recomendación número 13 (de un total de 21).
Las medidas propuestas defienden el carácter contributivo de la prestación; aunque consideran que debe enfocarse en la protección de los mayores de 65 años (cuya pensión constituye su principal fuente de ingresos) y suponer un beneficio para la de orfandad. Para ello, la comisión sugería tomar en consideración para su fórmula de cálculo los periodos de cotización acreditados por el fallecido. La comisión también proponía llevar a cabo de manera gradual la reformulación integral de las prestaciones por muerte y supervivencia –en especial la de viudedad–.
Sin embargo, la reforma de pensiones impulsada por el exministro de Seguridad Social y actual gobernador del Banco de España, José Luis Escrivá, no agregó estos cambios. Ahora, cinco años más tarde, Saiz propone ampliar esta prestación.

Las últimas cifras disponibles para un año completo muestran que la pensión de viudedad alcanzó un gasto récord de 29.404 millones en 2024 explicado, principalmente, por la revalorización de esta prestación, que explica 11.020 millones de gasto.

En este sentido, y tal y como se puede observar en las cifras publicadas por el Ministerio de Seguridad Social, mientras el importe medio total de la nómina y la pensión media crecen todos los años; el número de perceptores ha permanecido prácticamente estable en los últimos diez años, experimentando incluso ligeros descensos anuales.
Fuente: El Gobierno quiere ampliar la pensión de viudedad a parejas convivientes con hijos