Se suma a las voces de economistas que piden que se desglose ese dato para conocer cuántas personas en España no trabajan
UGT ha pedido este lunes al Ministerio de Trabajo que informe “de forma inmediata” sobre cuántos trabajadores fijos discontinuos se encuentran al final de cada mes en situación de inactividad y cobrando la prestación por desempleo cuando han generado derecho para ello, en línea con la petición que hacen distintos economistas y expertos.
“Quiero pedirle al Gobierno que de manera inmediata intente encontrar fórmulas para visualizar cuántas personas están en esas condiciones en el registro para poder tener información inmediata. Sé que no es fácil porque hay muchas personas fijas discontinuas cuyo periodo de paro no es permanente, sino que durante ese periodo tienen otros trabajos de carácter temporal entre temporada y temporada”, ha pedido Pepe Álvarez, secretario general de UGT, en una rueda de prensa de inicio de curso. Cree que no “será sencillo” pero “que sería bueno que se pudieran conocer esas cifras porque sería un dato más que podríamos incorporar a nuestros análisis”, ha defendido.
Aún así ha arremetido contra el Partido Popular por “mentir” al decir que el Gobierno ha cambiado el sistema de contabilización de los fijos discontinuos. “No se ha cambiado la norma de contabilización. Se puede decir que se quiere que haya transparencia y una nueva manera de dar los datos, y a mí me parece legítimo, nosotros también lo queremos porque estamos convencidos de que con eso lo único que hacemos es ganar desde el punto de vista de la bondad de la reforma laboral”.
Álvarez ha admitido que ahora hay muchos más fijos discontinuos en el país, porque “en España hay mucho trabajo de temporada, somos un país así porque tenemos una tasa de turismo altísima y porque el sector primario continua teniendo un peso importante en el sector productivo, y también la construcción”, pero ha señalado que los fijos discontinuos tienen un peso limitado respecto al total de indefinidos.
NO A CONTRATAR EXTRANJEROS PARA CUBRIR VACANTES
El líder de UGT se opone frontalmente a que el Gobierno recurra a la contratación en origen (en otros países) para cubrir vacantes de sectores en los que se necesita personal y no se encuentran trabajadores, por ejemplo aquellos que serán clave para la ejecución de las inversiones de los fondos europeos.
“UGT se opone a la contratación en origen para los sectores que dicen que tienen vacantes. Lo hacemos plenamente conscientes de que en nuestro país hay suficiente mano de obra para cubrir vacantes de forma generalizada. Si no se cubren puede ser por los salarios de miseria que se pagan en algunos sectores en nuestro país, hay que revisar al alza las condiciones de trabajo y si eso se da y mejora la orientación y la formación, vamos a poder cubrir la inmensa mayoría de las vacantes de puestos de trabajo”, ha defendido.
Además, ha señalado que aceptar que los parados no son adecuados para cubrir las vacantes demuestra que los servicios de empleo no son eficaces. “Me parece que renunciar a que los más de 3 millones de parados que hay según la EPA, o los 2,88 millones según el SEPE, no sean trabajadores para cubrir las demandas de las empresas es la prueba evidente del fracaso absoluto de los servicios de empleo de nuestro país”, ha criticado.
En su opinión, no hay nada que garantice que las ofertas de empleo que las empresas no consiguen cubrir sean realmente trasladadas a todos los parados del país, de ahí que no se pueda asegurar que no hay verdaderamente personal para cubrirlas. “¿Si esas ofertas no se trasladan a los parados, cómo sabemos que no hay personal suficiente?”, se ha preguntado Álvarez.
En ese sentido cree que la solución no debe pasar por ir al extranjero a contratar, “no porque esté en contra de la inmigración”, ha puntualizado, sino de que se mejoren las estrategias para facilitar el acceso al empleo de los parados. El dirigente de UGT ha ido más allá y ha acusado a las empresas de aprovecharse de la contratación en origen para contratar a “trabajadores no sindicados”, “tener una explotación sin límites” y “meterlos en barracas”.
REFORMA DE LAS PENSIONES Y SALARIO MÍNIMO
Sobre las negociaciones en marcha con el Gobierno, en lo relativo a la reforma de las pensiones el líder de UGT no ve cerca el acuerdo. “Lo tenemos que abordar en los pórixmos meses y digo meses porque creo sinceramente que el acuerdo no es inminente y hay cuestiones que hay que abordar. La inminencia o no del acuerdo va a tener que ver con la posición que mantenga el Ministerio de Seguridad Social”.
Álvarez no ha querido aclarar si el sindicato ha modificado su disposición a negociar la ampliación del periodo de cálculo para la pensión pública -José Luis Escrivá quiere llevarlo de 25 a 30 años con posibilidad de excluir los dos peores-, lo que antes se erigía como línea roja, y parece haber dejado la puerta abierta a flexibilizar esa posición a cambio de que el Gobierno haga otras cesiones: por ejemplo, bajar de 15 a 12 años el periodo cotizado mínimo que se exige para poder acceder a una pensión. Aún así, ha dejado claro que no firmaran un acuerdo sobre una propuesta que no cuente con las garantías políticas suficientes como para ser ampliamente apoyada en el Parlamento.
En cuanto a la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI), UGT urge al Gobierno a aprobar la nueva subida cuanto antes: “No tiene ningún tipo de justificación que no se haya subido ya el SMI a 9 de enero. Le exijo al Gobierno que deforma inmediata proceda a la subida del SMI, no hay excusas de ningún tipo para no subirlo, incluso las que antes podían aparecer han desaparecido: hoy hemos visto como el Banco de España saluda las subidas del SMI desde el punto de vista económico y valora positivamente el impacto que ha tenido sobre el consumo. Nadie ha podido demostrar que tenga efectos negativos sobre la creación del empleo”, ha defendido.
“El FMI, que está lejos de poder ser considerado una institución que no representa los intereses de los más poderosos, reclama justamente una subida de los salarios como instrumento para salir de la situación de crisis en la que estamos. En Alemania el SMI va a subir el 15%; en Bélgica, el 13%; en los Países Bajos, el 10%, o en Grecia, el 9,7%. En España se impone la necesidad de subirlo con la puerta abierta a revisarlo a mediados de año”, ha pedido.
