Con la entrada en vigor de la reforma del RETA para el próximo 2023, los autónomos en estimación objetiva o en módulos tendrán que hacer una aproximación – como ya lo hacían hasta la fecha de cara a la Agencia Tributaria – de sus rendimientos anuales. Esa previsión de rendimientos en función de los módulos que se les aplica les servirán para conocer cual es su base de cotización en el nuevo sistema.
La Seguridad Social ha establecido una fórmula general para todos los autónomos que servirá para determinar sus rendimientos netos y asignarles una base de cotización: calcular los rendimientos netos previos, sumarle todas las cuotas que ha pagado a la Seguridad Social durante el último ejercicio y restarle un 7% o 3% en función si es persona física o societario. Una vez obtenida la cifra, se divide entre 12 meses. El resultado es el rendimiento neto y en la tabla se puede saber la cuota que se va a abonar a la Seguridad Social:
Obtener el rendimiento neto previo de los autónomos en estimación objetiva dependerá de la actividad en la que se enmarque el emprendedor; no es lo mismo hacer el cálculo de módulos para un restaurante que para un taxi. Esto quiere decir que un hostelero calculara los rendimientos netos previos de su restaurante en función de toda la logística que dispone en su negocio, por ejemplo el número de empleados, de electrodomésticos, gastos de luz, etc. En lo que se refiere en la fórmula a “antes de amortización” significa el valor de mercado de dicho horno o nevera antes de haber sido utilizada para el desarrollo de la actividad.