EL MITO DE QUE CUANTO ANTES DEJES DE TRABAJAR MENOS COBRARÁS DE PENSIÓN

 

Los trabajadores que se jubilan antes de su edad de jubilación cobran un 20% más de pensión con respecto a los que se jubilan a su edad ordinaria a pesar de los recortes

En los últimos diez años, el sistema de pensiones en España ha sido objeto de dos reformas. La primera, aprobada en 2011 y aplicada desde 2013, estableció un incremento progresivo de la edad de jubilación para aquellos que no cumplían con los requisitos de cotización. La segunda, aprobada en 2021, introdujo medidas como el incentivo a las jubilaciones demoradas mediante un porcentaje adicional del 4% por cada año cotizado después de alcanzar la edad ordinaria de jubilación, o una cantidad fija basada en los años de cotización. El objetivo de esta reforma esa desincentivar las jubilaciones anticipadas para alinear la edad media de acceso a la jubilación con la edad legal. Aun así y según las estadísticas del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones muestran que uno de cada tres trabajadores deciden jubilarse a los 63 años y cobrando una pensión media de 1.767 euros, lo que supone 300 euros más que los que se jubilan respetando la edad ordinaria de jubilación legal.

 

Es habitual creer que la jubilación anticipada voluntaria puede resultar penalizada con una mensualidad menor debido a la reforma de las pensiones ejecutada a partir de 2021. Sin embargo, lo cierto es que los recortes efectuados no evitan que en algunos casos las personas que se acogen a la modalidad anticipada, la edad media se sitúa en los 63,2 años, puedan reciban una cantidad considerablemente mayor que quienes dejan de trabajar a la edad ordinaria de 65 años o de 66 años y seis meses en función de los años cotizados

 

Y es que pese a la reforma, las personas que optan por retirarse antes de lo normal, hoy en día suponen un 30% del total, Lo cierto es que, con los datos acumulados hasta mayo de 2024, las personas que acceden a una jubilación anticipada -y esta puede ser voluntaria o no voluntaria, especial, con bonificación o parcial- cobran de media 1.768 euros al mes de pensión. En el caso de quienes lo hacen a la edad ordinaria, esta cantidad se queda en, aproximadamente, 1.454 euros, es decir, más de 300 euros menos.

 

Esto se debe a que el principal factor para determinar la cantidad a cobrar de la pensión de jubilación no es el tiempo que se haya cotizado, sino la cantidad de dinero que haya ido a parar a las arcas públicas del salario de la persona en cuestión: la base de cotización.

 

Jubilarse forma anticipada tiene ‘premio’: la pensión es hasta 300 euros más alta

Jubilarse antes de la edad ordinaria que marca la ley, a los 65 años si acreditas al menos 38 años cotizados o 66 años y seis meses con una carrera laboral menos extensa, tiene ‘premio’. Entre comillas, porque las jubilaciones anticipadas están penalizadas y resultan en una prestación inferior por los coeficientes reductores endurecidos en la reforma de pensiones de 2021. La realidad es que, pese a estos recortes, la pensión media de quien se retira a los 63 o a los 64 años es hasta 300 euros más elevada que la de quien se jubila en la edad ordinaria. La pensión media de quienes cumplen la edad ordinaria es de 1.454 euros mensuales, frente a los más de 1.750 euros para la modalidad anticipada, un 20% más alta.

 

Lo cierto es que quienes acceden a la jubilación anticipada pueden ‘permitirse’ un recorte de entre el 13% y el 21% de su pensión contributiva, que son los porcentajes aplicados por salir 24 meses antes de los 65 o de los 66 años y medio del mercado laboral con diferentes etapas de cotización acreditadas, siempre más de 38 años y medio.

 

Las bases de cotización que aporta el trabajador a la Seguridad Social durante su carrera laboral determinan la cuantía de la pensión que percibirá una vez llegada la jubilación. Cuanto mejor sea el salario (y las cotizaciones), mejor será la pensión teniendo en cuenta que cumple los 15 años de cotización establecidos para cobrar al menos la pensión contributiva.

 

Esta diferencia entre quienes se jubilan anticipadamente y los que lo hacen de su edad legal ordinaria de jubilación (o incluso la demoran) se mantiene en los últimos años sin un efecto evidente de la reforma en términos de cuantía. El grupo que sale antes de los 65 cobra una pensión media cercana a 1.770 euros, por los 1.450 de los que cumplen la edad ordinaria.

 

Más de 112.000 personas se acogieron a la modalidad de jubilación anticipada durante 2023, sumando otras más de 42.000 en lo que va de año, con datos actualizados hasta mayo. La edad media en la que causan alta son los 63 años y casi tres meses y representan algo menos del 30% de todas las altas del sistema.

 

El porcentaje de jubilaciones anticipadas voluntarias se mantiene incluso por encima de la media de la última década pese a que se aplican recortes más duros. Sumando las salidas involuntarias –esencialmente, seniors que pierden el trabajo–, las salidas con penalización han pasado de representar el 39% en 2021 a ser ahora menos del 30%, con datos hasta junio.

La edad real o efectiva de jubilación ha escalado hasta los 65 años y casi tres meses en lo que llevamos de año (con datos disponibles hasta mayor), es decir, prácticamente cinco meses más más respecto a 2022 por el efecto de las penalizaciones sobre las salidas anticipadas y los incentivos para demorar la jubilación (reforma de 2021) y, especialmente, por el progresivo incremento de la edad legal de jubilación (reforma de 2011).

 

Hay que tener en cuenta que las personas que adelantan su edad de jubilación 2 años de manera voluntaria sufren un recorte en la cuantía de su pensión de entre el 13% y el 21%. Este porcentaje dependerá del total de años cotizados, es decir, a más años, menor será el porcentaje. Por otro lado, hay que entender que las bases de cotización durante la carrera laboral determinan la cuantía de la pensión. Cuanto mayor es la base mayor será la pensión, eso sí, siempre que se cumpla con los 36 años y seis meses necesarios para acceder al 100% de la base reguladora.

 

De esta forma, quienes reciben una mejor prestación sufren menos el efecto del recorte por la jubilación anticipada, ya que aún obtendrán una pensión elevada, superior por ejemplo a la de quienes se jubilan a la edad ordinaria y tienen solamente 15 años cotizados, que corresponde con el 50% de la base reguladora.

 

Evolución de las jubilaciones anticipadas

En 2020, se registraron 111.949 jubilaciones anticipadas con una edad media de 62,7 años y una pensión media de 1.692,63 euros. Esto representa un 39,16%. En lo que llevamos de 2024, se han producido un total de 168.722 jubilaciones de las cuales 49.080 son jubilaciones anticipadas, con una edad media de 63,2 años y una pensión media de 1.759,45 euros. Esto supone un 29,09%, es decir, que 1 de cada 3 trabajadores optan por una jubilación anticipada a los 63 años.

Si miramos los datos del ministerio de la Seguridad Social, mientras que las personas que se jubilan a los 63 años perciben una pensión media de 1.759,45 euros, las que lo hacen a su edad ordinaria (65 años y 6 meses) cobran una prestación de 1.454,80 euros. Esto supone una diferencia de 304,65 euros al mes, que al año son 3.655,8 euros. Incluso cobran más pensión que aquellos que acceden a una jubilación demorada, aquella que se da más allá de la edad de jubilación. En lo que llevamos de 2024, a estas accedieron un total de 16.851 personas, percibiendo una pensión media de 1.372,87 euros.

 

Una de las principales razones por las que la cuantía de la jubilación anticipada suele ser más alta que la de la jubilación ordinaria se debe a que estas pensiones corresponden a personas con cotizaciones más altas. Además, para acceder a estas se exigen un mínimo de 35 años, por los que en términos porcentuales estaríamos hablando de que estos trabajadores se garantizan casi el 100% de la pensión (antes de aplicar recorte por el anticipo sobre la edad).

 

Según datos de la Seguridad Social, las pensiones percibidas por jubilación anticipada son superiores a las de la jubilación a la edad ordinaria. En 2014, la pensión media por jubilación anticipada era de 1.486,96 euros, mientras que en 2024 ha ascendido a 1.759,45 euros mensuales, lo que supone un aumento de 272,49 euros. En el caso de las jubilaciones ordinarias, la pensión media en 2014 era de 1.199,81 euros, aumentando a 1.454,80 euros este año, lo que representa un incremento de 254,99 euros. Estas cifras incluyen todos los regímenes del sistema (general, autónomos, del mar, etc.).

 

Evolución de la edad media en la jubilación anticipada

En la última década, la edad promedio de jubilación anticipada ha experimentado un incremento, situándose en 63,2 años en 2024, comparado con los 62,1 años de 2014. Este incremento se distribuye de manera diferente según el género: los hombres suelen jubilarse a los 63 años, mientras que las mujeres lo hacen a una edad media de 63,5 años. La edad ordinaria de jubilación ha pasado de 65,7 años en 2014 a los 66,2 años en 2024. Por otro lado, la edad de retiro para las jubilaciones demoradas ha disminuido, bajando de 69 años en 2014 a 68,7 años para este año.

 

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