A esta prestación se podrán acoger las familias que ya reciban el IMV con un nivel de ingresos bajo. Se incentivará el acceso por la edad de los hijos y las familias monoparentales resultarán beneficiadas
Los Presupuestos Generales del Estado incluirán para 2022 una ayuda de hasta 100 euros para familias con hijos perceptoras del Ingreso Mínimo Vital y con ingresos bajos. Esta nueva prestación es fruto del acuerdo alcanzado entre Unidas Podemos y el PSOE mediante enmienda transaccional a las nuevas cuentas públicas. Su objetivo será apoyar a las familias en situación de vulnerabilidad y reducir la pobreza infantil en nuestro país.
Requisitos para cobrar la nueva ayuda
Además de ser preceptor previo del IMV, se podrán acoger las familias formadas por dos personas adultas y un niño con ingresos de hasta 27.000 euros, así como familias con dos niños y dos adultos por ingresos totales de hasta 32.100 euros. Asimismo, podrán ser beneficiarias las familias monoparentales con un hijo a cargo y rentas de hasta 25.700 euros de ingresos, y aquellas también monoparentales con dos niños a cargo que perciban hasta 30.800 euros anuales
En este sentido, se extenderá el anillo hasta tres veces el nivel de renta garantizada que se tiene en cuenta en estos momentos para poder acceder al IMV, y hasta 1,5 veces el patrimonio máximo que hay que tener.
El Ingreso Mínimo Vital (IMV) llega ya a 350.000 hogares españoles y cuenta con más de 800.000 beneficiarios. En esta línea, llegará a unos 390.000 hogares a finales de 2021, según ha indicado el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá. Este complemento no solo podrán recibirlo las familias que reciben el IMV, sino que se ampliarán los requisitos.
Prioriza la edad de los hijos
Por otra parte, en esta iniciativa prima a los hijos de hasta 0 a 3 años, ya que las familias con niños de 0 a 3 años obtendrán 100 euros al mes. Mientras que para las que tienen hijos de entre 3 a 6 años, la horquilla se fija en 70 euros y en el caso de 6 a 18 años se estipularán 40 euros. En esta línea, una familia monoparental formada por una madre que gana 200 euros mensuales y que tiene dos hijos, de 2 y 5 años, con el IMV actual recibe 661 euros, y con el nuevo complemento recibiría 170 euros más.
De igual manera, una mujer con dos hijos de 1 y 4 años que no recibe el IMV porque tiene unos ingresos de 1.000 euros mensuales, que sobrepasan el límite para acceder al IMV, recibiría 170 euros (100 euros por su hijo más pequeño y 70 por el mayor). La expectativa del ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones es que este complemento se apruebe este año y que el IMV como ley esté ya vigente en 2022. Con este complemento, prevé «un aumento muy sustantivo» en el número de familias beneficiarias.
Ley de Familias para «fortalecer el Estado del bienestar»
La ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, detalló que la Ley de Familias desarrollará un marco estatal de acompañamiento y apoyo para los primeros 3 años desde el nacimiento del bebé. Específicamente aludió a «un paquete» que incluirá medidas encaminadas a «garantizar un entorno saludable y seguro donde se desarrolle la crianza, el acceso a un sistema sanitario y educativo universal, y a una alimentación saludable para todos y todas».
Cambios en el IMV
La ministra Ione Belarra ha informado por su parte de importantes mejoras para el acceso y la cuantía del IMV para las familias con algún miembro con discapacidad. Las hogares recibirán una renta un 22% en caso de tener algún miembro con una discpacidad igual o superior al 65%. Además, las ayudas de dependencia no computarán como ingresos del hogar de cara al acceso al IMV, una cuestión que Belarra ha destacado que vulneraba «el principio de equidad» de estas familias en pobreza y con dificultades añadidas por discapacidad.
Por otro lado, Belarra ha comunicado otros cambios muy demandados desde colectivos sociales sobre el acceso de los jóvenes a la ayuda. Tendrán derecho a la prestación los jóvenes extutelados por la Administración desde los 18 años (ahora limitado a partir de los 23) y para el resto de jóvenes se reduce el período mínimo exigido de independencia del hogar familiar, de tres a dos años.
El acuerdo acabará también con el perjuicio en la cuantía de la ayuda que reciben ahora las familias monoparentales, la mayoría encabezadas por madres, con 4 o más hijos respecto a los hogares con dos progenitores.
Pasarela desde el paro
Otro de los cambios más destacados pasan por facilitar el acceso a la renta mínima estatal de las personas que agoten subsidios por desempleo y estén en situación de pobreza, así como de aquellas que se queden en esta situación de manera repentina, tras una gran reducción de sus ingresos.
Respecto a la primera cuestión, el Gobierno trabaja en una especie de «pasarela» con el SEPE para personas desempleadas que agoten sus subsidios y cumplan los criterios del IMV. La intención es que estas personas no se queden en ningún momento con cero ingresos como ocurre en la actualidad, ha explicado la ministra Belarra, lo que puede complicar mucho la situación de sus hogares. Por ejemplo, con una pérdida de la vivienda, ha apuntado la ministra, u otras situaciones que lleven a caer «al bucle de la pobreza» a estas familias, del que luego es más complicado salir.
En segundo lugar, Derechos Sociales y Seguridad Social han pactado facilitar el acceso al IMV de las personas que se queden de manera repentina sin ingresos. Esta ha sido una cuestión en la que han insistido mucho en Unidas Podemos desde la puesta en marcha de la renta mínima estatal, para que la prestación fuera una ayuda rápida para los hogares que afronten grandes dificultades en el año en curso y que no tengan que esperar al siguiente año para poder pedir la ayuda.
El acceso ante una caída repentina de ingresos se ha habilitado hasta el momento de manera temporal, mediante disposiciones legales que han alcanzado el tiempo que lleva en marcha la prestación, pero ahora la idea es regular esta situación de manera permanente en la legislación.
El acuerdo en el Gobierno supondría crear de manera estable una vía de acceso al IMV en el año en curso para personas cuyos ingresos se redujeran mucho. La Seguridad Social comprobaría que, con la renta del año actual, la persona solicitante cumple los requisitos de ingresos y patrimonio exigidos y, además, que la renta del año anterior no supera cierto límite. Este tope de renta en el año previo se prevé que sea de hasta tres veces el umbral de acceso del IMV, pero habrá que comprobar el resultado final de la tramitación parlamentaria.
Fuente: La Informacion y el diario