La vicepresidenta y ministra de Trabajo ha cosechado en julio 45,27 días de media de duración de los contratos laborales, el peor dato desde 2019.
Los datos han sido extractados por el sindicato USO en base a los indicadores oficiales del propio Ministerio de Yolanda Díaz. Y el departamento de estudios de USO señala que en el mes de mayo de 2022 ya se encontraba en plena vigencia la última reforma laboral y por tanto ya se pueden realizar comparaciones y hacer balances más homogéneos para ver lo que ha conllevado la aplicación de estos cambios legislativos. Y el número total de contratos registrados durante el mes de julio ha sido de 1.431.383 lo que supone una bajada 13,5% sobre el mismo mes del año 2022.
Es más, el porcentaje de contratos indefinidos realizados que se estaba estabilizando en el 44%, baja por debajo del 40%, dos puntos inferior al de 2022. “La cuestión que queremos plantear es ¿qué tipo de contratación indefinida se está realizando? ¿trabajamos más tiempo? ¿cuánto están durando estos nuevos contratos indefinidos? ¿cuántos de esos son a tiempo completo? ¿se ha incrementado la duración de la contratación temporal?”, se pregunta el sindicato. Y las respuestas las aporta el propio informe del departamento de estudios de USO: “En definitiva, ¿si hay más horas de trabajo o por el contrario estamos redistribuyendo las existentes? O simplemente hemos cambiado los contratos temporales de duración indeterminada por contratos indefinidos bajo la modalidad de fijos discontinuos“. Y lo cierto es que la duración media de los contratos temporales disminuye con respecto a la situación anterior a la reforma laboral, ocho días menos que en julio de 2021, quedándose en 45 días. Más en concreto, 45,27.
Ese mismo dato, en julio de 2019 quedó en 47,05 días. En julio de 2020 y con las medidas antidespido por el covid quedó en 53,33 días. Un año después ya bajó levemente hasta los 53,19. La gran caída se produjo el siguiente julio, el de 2022, con el fin de las medidas excepcionales por el covid: pasó a 45,85 días, ya por debajo de 2019. Y con la reforma laboral de Yolanda Díaz a pleno funcionamiento, en julio de este año 2023 ha seguido bajando hasta los 45,27 días. Todo un récord de precariedad laboral.
“Los contratos de duración inferior a la semana suponen el 19% del total de contratos realizados en mayo, son porcentualmente los contratos temporales que más se realizan ¿contratos de lunes a viernes? ¿esto coincide con el saldo negativo de afiliación a la Seguridad Social que se vienen produciendo todos los viernes?”, plantea el sindicato. “Estos contratos representaron en julio el 31% de los contratos temporales que se realizaron, uno de cada tres contratos temporales dura menos de una semana“, concluye USO.
En opinión de los expertos de USO, la cuestión de fondo sigue siendo la misma: «Hay más contratos indefinidos, pero el incremento se está produciendo en la contratación a tiempo parcial. El aumento interanual de los fijos discontinuos y los indefinidos a tiempo parcial supera a los que se realizan a jornada completa. Estamos repartiendo las horas de trabajo».
«Trabajamos menos horas semanales de media en 2023 que en 2022, con un mayor número de personas ocupadas. Este déficit del número de horas nos está indicando que, si tenemos un teórico récord de ocupación, esta ocupación se está realizando con personas que no completan una jornada entera de trabajo: tenemos más personas trabajando y se trabajan menos horas semanales. Esto no favorece ni la calidad del empleo ni la productividad asociada a él».
Fuente: Libre mercado Yolanda Díaz apoya pactar con Puigdemont otro 1-O mientras cosecha la peor precariedad laboral: 45 días por contrato – Libre Mercado