Mientras el ministro Escrivá sigue lanzando mensajes acerca de cómo reforzar y consolidar los ingresos del sistema de pensiones, los sindicatos y empresarios expresan su descontento ante la falta absoluta de diálogo y conocimiento de por dónde puede ir la reforma que el ministro quiere tener cerrada a lo largo del presente mes.
Hasta el momento, Bruselas está siendo el principal destinatario de los mensajes, pero fuentes sindicales señalan que la negociación con los agentes sociales está en el dique seco y hace más de dos meses que no se ha convocado por parte del ministro Escrivá la mesa de negociación. La razón de todo ello es que el Ejecutivo tiene un conflicto interno que no logra resolver, “un conflicto entre los socios de Gobierno, que podría hacer peligrar que un hipotético acuerdo cuente con el respaldo suficiente en la tramitación parlamentaria”, algo que estuvo a punto de suceder con la reforma laboral, aprobada in extremis.
Los sindicatos advierten que lo primero que hay que hacer para alcanzar un acuerdo antes de final de mes, como quiere el ministro Escrivá, “es negociar, y no se está negociando, por lo que difícilmente podemos llegar a un acuerdo”. También rechazan que la tercera llegada de fondos europeos, prevista para abril, esté condicionada a un acuerdo en pensiones pues no será hasta la cuarta entrega, en otoño, cuando sí será vinculante tener un sistema de pensiones sostenible. Estas prisas por finalizar este mes, señalan las fuentes consultadas, sería por la proximidad de las elecciones de mayo y diciembre.