LA SEGURIDAD SOCIAL: CRÓNICA DE UNA MUERTE ANUNCIADA

 

Las dos mentiras principales son: “las pensiones futuras están garantizadas” y “su pensión futura es un derecho que se fundamenta en las cotizaciones que usted pagó”.

 

Algunos dicen que no importa la situación financiera de la Seguridad Social porque está soportada por el Estado español, pero el problema es que el Estado español también está quebrado

 

Definición de Seguridad Social:

 

“Tarea nacional que impone sacrificios a los jóvenes respecto de los viejos; a los sanos, respecto de los enfermos; a los ocupados, respecto de los que se hallan en situación de desempleo; a los vivos, respecto de las familias de los fallecidos, a los que no tienen cargas familiares, respecto de los que las tienen; a los de actividades económicas en auge y prosperidad respecto de los sectores deprimidos”.

 

La Seguridad Social tiene más gastos (pensiones, personal, otros gastos…) que ingresos (cotizaciones de las empresas y de los trabajadores) desde 2008. En 2020, los gastos fueron 204.000 millones € (los principales fueron Pensiones 142.000; Incapacidad temporal 12.000; Prestaciones de maternidad y paternidad 3.000; Prestaciones familiares 2.600) y los ingresos 127.000 millones €. El déficit (gastos – ingresos = 204 – 127) fue, por tanto, de 77.000 millones €.

 

El déficit crece a buen ritmo. La evolución desde 2018 a 2020 ha sido: 35.000, 40.000 y 77.000 millones €. El déficit acumulado de los años 2015-2020 ha sido de 260.000 millones € y se ha financiado principalmente con transferencias del Estado (133.000), deuda del Estado (68.000) y venta de inversiones financieras (50.000).

 

El Fondo de Reserva de la SS (FRSS), la “hucha de las pensiones”, en 2020 asciende a 2.100 millones €, esto es, el 1% de los gastos del año. La Deuda de la SS en 2020 era de 85.000 millones € y sus fondos propios -68.000 millones €. Parece que hablar de “hucha de las pensiones” en 2020 es simplemente una ficción.

 

El Tribunal de Cuentas comenta que “no han resuelto los problemas de sostenibilidad financiera de la SS, que son de naturaleza estructural, ni contribuyen al saneamiento de su balance y de su cuenta de resultados, ni tampoco tienen reflejo en su neto patrimonial, que continúa siendo negativo”.

 

¿”LAS PENSIONES ESTÁN GARANTIZADAS”?

Las dos mentiras más habituales son: “las pensiones futuras están garantizadas” y “su pensión futura es un derecho que se fundamenta en las cotizaciones que usted pagó”.

Es de justicia que se informe a los españoles de la verdad, de cómo están las cosas, que nos diga la verdad sobre las pensiones futuras y las cuentas del Estado.

 

 

 

Algunos ejemplos:

 

José Luis Escrivá. 25 de febrero de 2022. “En 2022 se inicia un marco de certidumbre absoluta sobre la revalorización de las pensiones en el futuro. Los 11,5 millones de pensionistas que hay en España, saben, y los futuros también, que en el año 2023 sus pensiones se revalorizarán con la inflación”.

 

Íñigo Méndez de Vigo. 23 de febrero de 2018. “La pensión… es un derecho de las personas que se lo han ganado en su vida laboral… en España las pensiones públicas están garantizadas”.

 

Pedro Sánchez. 21 de marzo de 2018. “El sistema de pensiones en nuestro país se puede sostener… es compatible tener unas cuentas saneadas en la SS… con tener jubilaciones dignas que evolucionen en función del IPC“.

 

Fátima Báñez. 22 de noviembre de 2016. “Sus pensiones están garantizadas en el medio y en el largo plazo… tenemos un sistema público de pensiones fuerte, sostenible…”.

 

Celestino Corbacho. 19 de mayo de 2010. “Sin duda, las cuentas de la SS están saneadas”.

 

La siguiente tabla permite identificar las causas de esta lamentable situación.

Las causas del déficit creciente son bien conocidas:

 

  1. Los nacimientos anuales pasaron de unos 670.000 anuales hasta 1977 a los 340.000 de 2020. Desde 2016 el número de nacimientos es inferior al de defunciones.
  2. El número de pensiones pasó de 8,7 millones en 2010 a 9,9 millones en 2021
  3. La pensión media mensual pasó de 786 € en 2010 a 1039 € en 2021 (aumento anual del 2,6%).
  4. La inflación (según la calcula el Estado) fue 354%, pero la pensión media subió un 869%, más del doble que la inflación.
  5. El aumento de la “pensión media deflactada” mide el aumento de la pensión media por encima de la inflación: fue un 113%. Esto significa que, además de subir con la inflación, se multiplicó por 2,13

 

El ratio pensiones/habitantes pasó de 0,12 en 1981 a 0,21 en 2020 y el ratio Número de pensiones/nacimientos en el año pasó de 8,6 en 1981 a 28,9 en 2020.

 

La tabla muestra también estos datos para periodos de cinco años que permiten deducir que los peores años para las pensiones están por llegar dado que la pirámide de población (en realidad “el cedro de población”) de 2021 tiene su mayor concentración de personas en el rango de edad de 40 a 55 años.

¿”EL ESTADO PUEDE SOPORTAR EL DÉFICIT DE LA SEGURIDAD SOCIAL”?

A veces se oye decir que “no importa la situación de la Seguridad Social porque está soportada por el Estado español”. El problema es que el Estado español también está quebrado. La Deuda del Estado ha aumentado enormemente (ha llegado a 1.419.000 millones € en 2021) porque los ingresos del Estado han sido inferiores a sus gastos desde 2008. En los años 2008-2020 el agujero del Estado fue 940.000 millones €.

Los cuatro mayores impuestos (Seguridad Social, IVA, IRPF y Sociedades) suponen un 80% de los Ingresos. Las partidas prestaciones sociales, remuneración de los asalariados del Estado, intereses y subvenciones suponen un 80% de los Gastos

En realidad, el pasado ejercicio se cerró con un panorama muy sombrío en materia de salud fiscal, puesto que el déficit registrado por las Administraciones Públicas superó el 8% del PIB. Para entender esta cifra mejor, basta con señalar que dicho umbral supone triplicar el nivel máximo permitido en las reglas de la Eurozona, que volverán a aplicarse de forma plena desde 2023 en adelante. No solo eso: en términos monetarios, hablamos de un déficit cercano a los 100.000 millones de euros, lo que también supone triplicar el descuadre fiscal heredado por Pedro Sánchez en 2018.

 

Lo peor es que los datos son claros y nos muestran que los niveles de ingresos tributarios ya están alcanzando récords históricos, pese a lo cual las cuentas siguen en “números rojos”. Si comparamos los datos de 2012 con los de 2022 vemos que los caudales públicos se han disparado desde los 390.992 hasta los 531.741 millones de euros, según los datos del FMI.

Tomando de nuevo los datos del FMI, podemos ver que, en los años de gobierno de Mariano Rajoy, las Administraciones operaron bajo una mayor contención presupuestaria. Así, los desembolsos pasaron de 502.000 a 466.000 millones entre 2012 y 2014, para luego crecer de forma moderada entre 2015 y 2017, hasta los 479.000 millones. Sin embargo, la llegada al poder de Pedro Sánchez ha disparado el ritmo de gasto de las Administraciones hasta alcanzar niveles nunca antes vistos.

Fuente:  El Estado español está quebrado. España todavía no

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