Pueden sumar el 75% de la pensión al salario si continuan trabajando
Si algún sector está necesitado de personal y al mismo tiempo, tiene un elevado porcentaje de profesionales llegando a la edad de jubilación, es el de los médicos de atención primaria. Es la especialidad médica con mayor ratio de personas de más de 60 años –una de cada tres– y se ocupan de una área sanitaria en que hay una elevada demanda difícil de cubrir. Son dos características que la convierten en un excelente terreno de pruebas para lanzar un plan piloto con incentivos para retrasar el pase a la jubilación.
El proyecto piloto, que se aplica durante tres años, ofrece incentivos a los médicos y pediatras de atención primaria para que adopten la jubilación activa; en definitiva, para que retrasen la edad real de jubilación. En función de los resultados que dé la prueba, podrá implementarse después en otras áreas y otras profesiones.
Este plan piloto para la atención primaria se aprobó en diciembre, pero es partir de Semana Santa cuando está realmente operativo y desde entonces, en estas semanas, son 171 médicos lo que se han apuntado, 22 de los cuáles en Catalunya. Un número que se está acelerando, según indican en el Ministerio de Inclusión y Seguridad Social.
Los incentivos son jugosos. Por un lado, los médicos que llegados a la edad legal de jubilación continúen trabajando, seguirán cobrando la totalidad del salario al que sumarán el 75% de la pensión. Otra opción es que pasen a desempeñar una jornada parcial, con lo cual recibirán la mitad del salario y también el 75% de la pensión.
Inclusión presentará antes del 30 de junio una propuesta para facilitar la jubilación activa y parcial
Además del ofrecimiento de estos incentivos, se ha tenido que modificar la normativa legal, porque en contraste con el sector privado, donde los médicos tienen varios opciones para prolongar la vida laboral más allá de la edad legal de jubilación, en el público no estaba permitida a los médicos la jubilación activa y la jubilación parcial era imposible en la práctica porque no está desarrollada de forma reglamentaria para los funcionarios o el personal estatutario.
La elección de los médicos de atención primaria para hacer esta prueba se justifica porque es un sector que afronta un déficit temporal de personal acuciante por la próxima jubilación de promociones de médicos que fueron particularmente numerosas en los años ochenta. Dos cifras ilustran la urgencia para actuar: de los 42.000 médicos y pediatras de atención primaria, , hay 12.000 que tienen entre 60 y 65 años y 1.500 con más de 65. El plan tendría que servir de solución puntual, de emergencia, esperando que los procesos para reforzar las plantillas tengan efecto, y también que se sobrepase el horizonte temporal a partir del cual van a producirse menor cantidad de jubilaciones.
La iniciativa forma parte de la panoplia de medidas que está activando el Ministerio de Inclusión y Seguridad Social para retrasar la edad real de jubilación. En este sentido, tiene que presentar antes del 30 de junio una propuesta a los agentes sociales para potenciar la jubilación activa y parcial. Será el inicio de las negociaciones con patronal y sindicatos para buscar potenciar estas fórmulas.
Estos planes se añaden a otras medidas ya en vigor de incentivar la prolongación de la vida laboral. Consisten en recompensar a los trabajadores que retrasen el paso a la jubilación. Desde enero de 2022, la Seguridad Social ofrece un complemento a la persona que retrase voluntariamente el paso a la jubilación, y se le da a elegir entre dos opciones.
Una es obtener un porcentaje adicional del 4% por cada año completo cotizado después de cumplir la edad en que le correspondería jubilarse, lo que le supondrá un aumento de la cuantía de la pensión que finalmente recibirá. La prestación puede llegar a superar el tope máximo de la pensión pública.
Una segunda posibilidad es substituir el porcentaje del 4% por una cantidad a tanto alzado que se percibirá de una sola vez una vez se pase a la jubilación. El cheque puede oscilar entre 4.400 y 13.000 euros por año de demora en función del periodo de cotización y del importe de la pensión.
Son 171 médicos y pediatras los apuntados hasta el momento en este plan piloto de tres años
También existe la posibilidad de la jubilación parcial, a la cual puede accederse si se retrasa un año la jubilación. Una vez transcurrido este periodo, se puede seguir trabajando a tiempo completo o parcial cobrando al mismo tiempo el 50% de la pensión.
Son elementos en los que insiste el Ministerio de Inclusión y Seguridad Social, porque en la reforma de las pensiones parte de la sostenibilidad del sistema se sostiene sobre la previsión de que un número importante de trabajadores demorarán su paso a la jubilación, con lo cual se podrá hacer frente al pico del gasto que llegará en el entorno de 2047 por la incorporación de los baby boomers a la jubilación.
Fuente: La Vanguardia
