La sangría de la hucha de las pensiones, ese fondo de reserva que debería aportar liquidez al sistema para abonar las pagas extraordinarias de verano y Navidad, ha obligado al Gobierno a recurrir de urgencia a préstamos del Estado que han disparado la deuda de la Seguridad Social, según revelan los datos que maneja el Banco de España.
De acuerdo con las cifras que ha hecho públicas el supervisor, el endeudamiento de la Seguridad Social alcanzó los 34.863 millones de euros en septiembre, tras dispararse 11.676 millones respecto al mismo periodo del año pasado, «tras un largo período en el que la deuda de este subsector había permanecido constante».
El motivo, según aclara el Banco de España al pie de una nota informativa, «la evolución de la deuda de las Administraciones de Seguridad Social está determinada por los préstamos concedidos por el Estado a la Tesorería General de la Seguridad Social en julio y noviembre de 2017, aprobados por la Ley 3/2017 de Presupuestos Generales del Estado para el año 2017, y de junio de 2018, aprobado por la Ley 6/2018 de Presupuestos Generales del Estado para el año 2018«.
¿Qué ha sucedido en el cierre del verano? Hay que recordar que el préstamo del Estado a la Seguridad Social para complementar el pago de las pensiones era este año de 13.830 millones de euros. El Gobierno tuvo que disponer en julio de 7.500 millones para hacer frente a la paga extraordinaria. Quedaban por gastar 6.330 millones que se han liberado ahora en diciembre para pagar la extra de Navidad.
Seguridad Social incluida, la deuda del conjunto de las administraciones públicas alcanzó en el tercer trimestre los 1,176 billones de euros, lo que supone un incremento del 3,7% respecto al mismo periodo del año anterior, y se sitúa en el 98,3% del PIB, una décima menos que en el mismo trimestre de 2017, pero por encima del objetivo del 97% para el conjunto del año.