En el libro del economista José Antonio Herce, «A vueltas con las pensiones«, presentado ayer jueves, asegura que una solución para la falta de ingresos necesarios para afrontar el pago de las pensiones pasa por «indiciar la edad de jubilación a la esperanza de vida» pues «cada 24 horas se ganan cinco horas de esperanza de vida» y recuerda que la esperanza de vida en la actualidad alcanza los 82 años y que los 12 años de la jubilación (en torno a los 77) el Sistema ya ha devuelto todo lo cotizado por el trabajador y los empleadores.
La segunda idea que surge para solventar las deficiencias del sistema viene por el futuro del tejido productivo, con una importante presencia de máquinas. Se prevé que estos robots, por cada dos puestos de trabajo que sustituyan (o destruyan), crearán otros cinco de mayor calidad, mejor remunerados y con una mayor aportación a las arcas públicas.
