La aseguradora Vivaz ha desmentido el mito de que la jubilación vaya asociada a una mala salud, lo que argumentó durante la presentación del estudio ‘Jubillennials: El impacto de la jubilación en la salud a partir de los 65 años«, trabajo que fue elaborado por esta marca de seguros de salud de Línea Directa Aseguradora, con la colaboración de la Universidad Francisco de Vitoria de Madrid y el Instituto de Salud Carlos III.
Como punto de partida, este estudio se centró en la conservación o deterioro, ambos posibles, en la calidad de vida de las personas que se jubilan, así como en su estado general de salud física y mental y el uso que hacen de los servicios del Sistema Nacional de Salud (SNS), con mención también, según expresaron sus responsables, de aquellas prestaciones que aún no están cubiertas.
El estudio que faltaba
Como portavoz de Vivaz, Francisco Valencia empezó con la afirmación de que la marca aseguradora de salud hija de Línea Directa es una firma joven que, a sus dos años de existencia, tiene una clara impronta de entidad nativa digital.
Este directivo explicó que el estudio obedece a un enfoque ajustado al período que va de los 55 a los 75 años de edad, para conocer los perfiles y hábitos de vida de las personas que están en su última década de vida laboral y el tramo principal de los Jubillennials.
Todo ello ante la perspectiva de prever que en 2023 la población española contará con un 25 por ciento de personas mayores de 65 años de edad, en un país con una media de 83 años de longevidad media para ambos sexos, que gana meses año a año de esperanza de vida al nacer.
Francisco Valencia también adelantó que, en menos de 15 años, se triplicará la cifra de personas centenarias en el país, algo que evidenció con una animación digital en la que se apreció como la pirámide poblacional española se estrecha progresivamente por la base, en los tramos de población joven, para engrosarse en la cúspide, donde se contabilizan las edades avanzada, principalmente, al entrar en edad jubilar los niños del Baby Boom, según señaló, lo que dota a la pirámide de una silueta de hucha con base precaria, tan característica de los países altamente desarrollados y envejecidos.
También con datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), Valencia destacó que en solo 13 años se alcanzarán los 24.000 millones en concepto de gasto sanitario, por una subida equivalente a dos puntos del PIB.
Nunca había pasado
Para este portavoz de la aseguradora es del todo inédito en la historia de la Humanidad que haya tantas personas, tan mayores y con tan buen estado de salud, por haber superado en buena medida causas seculares de mortalidad prematura, como las grandes guerras, las epidemias de gran letalidad y las malas condiciones de salubridad. De esta forma, ya es posible, según sus palabras, dar sentido pleno y verdadero al concepto de júbilo asociado a la jubilación, entendido ese primer término como «gritar de alegría» en su origen etimológico, algo que, en su opinión, no era tan sinónimo hasta hace menos de medio siglo, aproximadamente.
En el plano corporativo, Valencia explicó que una de las aportaciones de Vivaz a la buena salud de la población es que aquellos clientes que duermen, al menos, siete horas al día, cuentan con una bonificación en su prima de seguro de salud.
Por todo ello, este ponente desterró el estereotipo del jubilado sentado al sol esperando el final de su días, al disfrutar los mayores de hoy de una mejor salud y más serenidad que antaño e incluso que en las etapas postreras de la vida laboral.
Esta es una excelente noticia, aseguró Valencia, en sintonía con el país más sano del mundo, según el índice del Instituto Bloomberg de países más saludables del planeta, en el que siguen a España otras naciones, como Italia, Japón, Suecia, Singapur e Indonesia.
Contra todo tópico
Como segundo ponente del día, el catedrático de Fisiología en la Universidad de Granada (UGR), Manuel Castillo, entró en el detalle del trabajo presentado y aportó datos como que los ciudadanos jubilados hacen ejercicio físico tres veces al día en un porcentaje del 28 por ciento incremental respecto a cuando trabajaban.
También expuso Manuel Castillo que se trata de un colectivo que está más satisfecho con su vida social en el 9 por ciento de los casos que cuando estaba en activo laboralmente, al subir al 57 por ciento esta magnitud, y con una ausencia de un 27 por ciento más de síntomas de depresión, con un retroceso del 61 por ciento en tabaquismo y del 6 por ciento en consumo de alcohol, al pasar estas prácticas del 25 al 14 por ciento, y del 83 al 79 por ciento, respectivamente.
Desmintió, además, Castillo que los jubillenials hagan una mayor frecuentación de los servicios sanitario, al salir de la escala de grupos demográficos en los que se mantienen la depresión, como la adolescencia, el síndrome del nido vacío o el post parto.
Al abundar en los aspectos psíquicos, este ponente comentó que el 18,5 por ciento de los españoles situados entre los 55 y los 75 años tiene síntomas depresivos, con mayores prevalencias en la Comunidad Valenciana, 22,8 por ciento; Andalucía, 22,5 por ciento; y Canarias, 21,2 por ciento; frente a otras regiones con menores tasas de este problema mental, como La Rioja, 6,1 por ciento; País Vasco, 11,4 por ciento; y Castilla-La Mancha, 13,6 por ciento.
Además, destacó Castillo la vuelta a la dieta mediterránea del 68 al 75 por ciento, por parte de los jubilados, en sintonía con la dieta japonesa, que es la otra forma más sana de comer que hay en el mundo, según apostilló.
Jubilación y salud
Sobre la vacunación de la gripe, estima este ponente, que también es presidente científico de la Sociedad Española de Medicina Antienvejecimiento y Longevidad, que es un tipo de prevención que sube tras la jubilación hasta un 119 por ciento, con un aumento paralelo del 9 por ciento en chequeos y una subida en la detección precoz del cáncer del 44 por ciento.
En el otro platillo de la balanza, indicó Castillo que este colectivo también presenta problemas específicos. Concretamente, los ciudadanos que van de los 65 a los 75 años se medican un 21 por ciento más, con datos de polimedicación de cinco medicamentos diarios o más, que se incrementa en un 107 por ciento tras dejar de trabajar, aunque buena parte de este incremento farmacológico va dirigido a controlar factores de riesgo, según refirió una parte importante de los entrevistados.
Guarda relación con este último dato que, tras la jubilación, se produce un incremento del 10 por ciento en la indicación de analíticas, del 20 por ciento de las ecografías y del 28 por ciento de las radiografías.
Para Castillo, este estudio de Vivaz evidencia que las personas jubiladas en España, o en edad próxima a la jubilación, no hacen un mayor uso del SNS que el resto de la población, realidad que no obsta para que reclamen más coberturas, como un 86 por ciento para salud dental, un 52 por ciento para aumentar las operaciones de la vista, y la financiación de gafas y lentillas, y podología, en un 51 y un 45 por ciento, respectivament, a lo que sumó un 43 por ciento que reclamaron, igualmente, mayor atención de Fisioterapia.
Datos de estudio
Este estudio consta de 1.700 entrevistas con una submuestra comparada de 1.295 sujetos, de los cuales 581 estaban laboralmente en activo y 714 jubilados, con población proporcional en edades y sexos, dentro del rango elegido y un error muestral del -2,38 por ciento y un nivel de confianza del 95 por ciento.
Fuente: actasanitaria
