A pesar de la reforma laboral, en mayo de 2022 se firmaron 910.168 contratos temporales (de los cuales el 32,58% fueron a tiempo parcial), y el 91,91% han sido por Circunstancias de la Producción o de Sustitución, con la siguiente descomposición:
Por otra parte en mayo se firmaron 599.502 contratos indefinidos de los cuales 291.308 fueron a tiempo completo (el 17,76%), 174.595 a tiempo parcial y 264.524 fijos discontinuos.
La duración media de los contratos a cierre de mayo se ha situado en 43,3 días, según datos del SEPE, por lo que está ya por debajo de lo que marcaba en diciembre de 2021, antes de que entrara en vigor la reforma laboral aprobada por el Gobierno y que iba a acabar con la precariedad laboral en España. En diciembre de 2021 según la misma fuente, la duración media era de 45,6 días
La duración media de los contratos estaba subiendo en los primeros meses del año, hasta alcanzar los 60,6 días en marzo, pero desde abril ha empezado a caer y ahora ya es inferior a antes de que entrara en vigor la reforma laboral. Se siguen haciendo muchos contratos de menos de una semana y los viernes siguen siendo días con saldo negativo de afiliación a la Seguridad Social. Se han convertido a fijos discontinuos miles de contratos temporales, que cuando dejaban de trabajar engrosaban la lista de parados y ahora no lo hacen.
La duración media de los contratos estaba subiendo en los primeros meses del año, hasta alcanzar los 60,6 días en marzo, pero desde abril ha empezado a caer y ahora ya es inferior a antes de que entrara en vigor la reforma laboral. Se siguen haciendo muchos contratos de menos de una semana y los viernes siguen siendo días con saldo negativo de afiliación a la Seguridad Social. Se han convertido a fijos discontinuos miles de contratos temporales, que cuando dejaban de trabajar engrosaban la lista de parados y ahora no lo hacen.